martes, 9 de marzo de 2010


¿Por qué, el aire surcando,

dilatándose del bronce los sonidos;

y sin cesar vibrando

llegan a mis oídos

profundos y tristísimos gemidos?

¿Por qué de muerte el canto

en torno de ese féretro resuena?

¿Por qué el fúnebre llanto?

¿Por qué la amarga pena,

los cirios, y el clamor que el aire llena?

Te miro ante mis ojos

postrado sin aliento, amigo mío;

y sobre tus despojos

su manto negro y frío

tiende la muerte con placer impío.

Y en alas de querubes,

envuelta tu alma en esplendente velo,

y entre rosadas nubes

deja el impuro suelo,

y blandamente se remonta al cielo.

¡Oh, quién te acompañara!,

y ese mundo feliz que habitas hora

contigo disfrutara,

y la paz seductora

que, sin turbarse, en él eterno mora.

En mi patria no viera

sangre correr por la ciudad y llanos,

y que entre rabia fiera

hermanos con hermanos

hasta hundirse el puñal pugnan insanos.

Ni viera la perfidia

de nación, que risueña nos abraza,

y bramando de envidia

luego nos amenaza

y en su mente infernal nos despedaza.

Ni viera hombres malvados,

que sin temer de Dios el alto juicio,

de la ambición guiados

y el deshonroso vicio,

despeñan mi nación al precipicio.

Ni con feroz despecho

la miseria, elevándose espantosa,

cerrar contra su pecho

la humanidad quejosa

y devorar sus lágrimas ansiosa.

Y el luto y exterminio,

en pos del hambre descarnada y yerta,

extender su dominio

sobre su tierra muerta,

y a la peste letal abrir la puerta.

Feliz mi caro amigo,

feliz mil veces tú, que ya en el mundo

el dolor enemigo

con brazo furibundo

no rompe tus entrañas iracundo.

Dichoso tú, que vives

entre el gozo, la paz, la bienandanza

y no, cual yo, recibes

de amor sin esperanza

zozobras y martirios sin mudanza.

Y no sientes el yugo

de la suerte pesar sobre tu cuello,

ni el hombre es tu verdugo,

ni con ansia un destello

buscas de la verdad, sin poder vello.

Cuando el mundo habitabas,

con la voz de amistad consoladora

las penas aliviabas

de tu amigo, que ahora

hundido en e1 pesar tu ausencia llora.

A1 escuchar tus cantos,

do la razón brillaba y la poesía,

celestiales encantos

mi corazón sentía,

y en su mismo dolor se adormecía.

Si a tu alma por ventura

le es permitido descender al suelo,

cuando la noche oscura

me traiga el desconsuelo

ven a elevar mi pensamiento al cielo.

De mi agitado sueño

las escenas de horror benigno ahuyenta;

la imagen de mi dueño

en vez de ellas presenta,

y haz que tu grata voz mi oído sienta.



6 comentarios:

  1. Esta muy bien tu trabajo el poeta es muy interesante y lo mas agradable es saber que es un mexicano, el estilo del blog va muy deacuerdo con el poeta.

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  2. Hola Nati
    Pues tu poeta es muy interesante,pero la bibliografía la deberías de escribir en primera persona, tambien puedes modificar colores para darle mejor vista.

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  3. En cuanto a los poeemas,
    estan muy bonitos, me gustaron
    Espero tu comentario en mi blog.

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  4. hola ninia sabes me encantaron tus poemas estan geniales y como ya te dijeron se ven muy bien y si no te le dijeron es porque te tienen envidia jajajajaja, no ya encerio esntan geniales bueno te cuidas ok

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  5. Hola naty bueno me gusto tu blog esta muy bonito y el video que pusiste me parecio muy interesante bueno te felicito de verdad me gusto mucho tu trabajo espero tu comentario en mi blog sale adios.

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